En muchas ocasiones, nuestros pacientes acuden a nuestra clínica buscando un tratamiento que solucione un problema estético que es más habitual de lo que creemos: las arrugas en el cuello.
Si bien las arrugas en el cuello son parte de un proceso natural, ciertos hábitos y estilos de vida pueden contribuir con su aparición prematura. Es por ello que, en este artículo queremos hablarte sobre las causas de su aparición, tratamientos y resultados.
A medida que la piel envejece esta se vuelve más delgada y menos elástica, siendo incapaz de recuperarse mostrando arrugas, pliegues y líneas en el cuello. No obstante, existen diversos factores que contribuyen con su aparición:
Por suerte, existen algunos tratamientos estéticos que contribuyen con la disminución de las arrugas del cuello, brindando una apariencia natural a la piel.
Es una de las soluciones más adecuadas para disminuir las arrugas del cuello. Los hilos tensores están elaborados de polidioxanona (PDO), un material reabsorbible que se utiliza como hilo de sutura y que se coloca a nivel subcutáneo donde se quiere mejorar la flacidez y el aspecto de la piel. Se trata de un tratamiento mínimamente invasivo que se aplica con anestesia tópica, y no ocasiona alergias ni rechazo.
Según las características de cada paciente, se le implantarán hilos lisos o espiculados. Su efecto tensor favorece la producción de colágeno y elastina, disminuyendo las arrugas para mostrar una piel más firme y tersa.
El resultado de este tratamiento se visualiza alrededor del primer mes, consolidándose en el tercer y cuarto mes, con una duración que oscila entre los 12 y 18 meses, aunque es posible realizar sesiones de mantenimiento con el fin de dar continuidad a los resultados.
La toxina botulínica tipo A, o botox, produce un efecto que bloquea las señales químicas que ocasionan que los músculos se contraigan, relajándolos para hacer desaparecer las arrugas del cuello.
Es un procedimiento sencillo que no requiere de hospitalización permitiendo retomar de forma inmediata la vida social.
Los resultados de este tratamiento son visibles a los pocos días con una duración que oscila entre los 5 y 6 meses, aunque también se pueden aplicar nuevas sesiones para prolongar sus beneficios.
Una exfoliación puede conseguir renovar la piel, eliminando las arrugas finas y atenuando las más profundas. Es un tratamiento donde se utilizan distintas sustancias según sea el caso y el tipo de piel.
Los resultados varían en función de los materiales aunque suele tener una duración de entre 3 y 4 meses, mejorando la apariencia y textura de la piel.
El ácido hialurónico es una sustancia que se encuentra de forma natural en el organismo por lo que no hay riesgo de alergia y rechazo. La misma tiene un efecto hidratante que rellena y da volumen eliminando las arrugas.
Los resultados con este tratamiento son inmediatos destacándose por la apariencia natural, la duración depende del tipo de piel y de los cuidados aplicados.
Si deseas conocer un poco más sobre estos tratamientos para las arrugas del cuello, no dudes en ponerte en contacto con nosotros. En la Clínica Gloria Santomauro, clínica de medicina estética en Madrid, disponemos de las técnicas estéticas más innovadoras que ofrecen los mejores resultados.